Como estudiante
profesional, como una vez me describí, he visto muchísimas presentaciones en la
que el conferenciante utiliza una presentación proyectada en una pantalla. Unas
han sido fáciles de leer y otras jamás las entendí. Hoy comparto algunas de las
características de una buena presentación.
Primeramente,
la presentación tiene que ser fácil de leer. Por lo tanto, las plantillas deben
verse limpias y no debe llevar oraciones ni párrafos completos. Por el
contrario, deben llevar frases o ideas principales que te guíen durante la
presentación. Por esa razón, puedes tener una plantilla en la que solamente incluyas
una imagen sin texto. La imagen te ayudará a recordar lo que deseas comunicar.
Si decidieras
usar texto, debes seguir las guías que incluyo en la foto siguiente para que el
público pueda leer fácilmente la información. Si el texto es muy pequeño o la
presentación está demasiado cargada, el público se perderá. Mira este ejemplo.
Estas son
las guías básicas, pero hay muchas otras funciones que puedes incluir como, por
ejemplo, programar para que los textos aparezcan en la pantalla poco a poco y
escoger transiciones entre plantillas para que la presentación se vea más viva.
Lo importante es no utilizar demasiadas funciones a la vez para no incomodar el
ojo del lector.
Espero que
estas ideas te ayuden con tus próximas presentaciones. Si tienes preguntas,
puedes escribirme a: vigimaris@editorialnarra.com
y, con gusto, te ayudo.
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