domingo, 28 de diciembre de 2014

12 días en París



Una de las experiencias más hermosas que me trajo el 2014 fue la oportunidad de viajar a París. Pasé por allá casi dos semanas y todavía se me quedaron lugares por visitar. La ciudad es hermosa y, desde luego, si no está en tu lista, te exhorto a que la incluyas.

En las próximas semanas, compartiré en este blog mi experiencia en la ciudad. Escribiré sobre las iglesias, los museos, las librerías y demás lugares de interés, así como mi experiencia en una ciudad que acoge a los artistas y, particularmente, a los escritores.

Durante esos días, visité la ciudad siguiéndoles los pasos a los autores que vivieron allá en el siglo pasado. Me enfoqué, sobre todo, en Ernest Hemingway, cuyos escritos conocí poco antes del viaje y a través de cuyos ojos vi la hermosa ciudad.

La serie es de 12 artículos y el primero se publicará el domingo, 4 de enero de 2015. En cualquier momento durante la serie, si tienes comentarios o preguntas, me puedes escribir: vigimaris@editorialnarra.com

Mientras tanto… bon voyage!

domingo, 21 de diciembre de 2014

Se acerca el fin de año



Es momento de pasar lista y celebrar los acontecimientos y los logros del año. Yo, por ejemplo, en el 2014:

  • di un viaje maravilloso (compartiré los detalles en el blog comenzando en enero de 2015).
  • aprobé mis exámenes doctorales
  • presenté en la convención de maestros de inglés, Puerto Rico TESOL
También es momento de planificar el año 2015. Por ejemplo, puedes marcar en tu calendario:

  • las fechas de las vacaciones y los lugares que quieres visitar
  • las actividades personales, familiares y profesionales en las que quieres participar
  • tiempo para preparar los documentos de la planilla

Además de separar esas fechas, es importante asignarle un presupuesto a cada una. De esa manera, sabrás cuánto dinero debes reservar a la semana, la quincena o el mes para que el gasto sea manejable y realmente puedas cumplir tus planes. Si no los planificas, los gastos podrían parecer demasiado altos y podrías terminar cancelando tus planes.

En el 2015, ampliaré la oferta de cursos por email porque la modalidad ha gustado muchísimo. El curso brinda mucha información de una manera que es fácil de entender e incluye ejercicios para que se practique lo aprendido.

Los demás planes los dejaré para otro momento porque el elemento sorpresa también es importante.

Te invito a compartir tus logros del 2014 y tus planes del 2015. Comenta aquí en el blog o envíame un correo electrónico: vigimaris@editorialnarra.com.

Recuerda que estoy aquí para apoyarte.

domingo, 14 de diciembre de 2014

Mi tío me enseñó a comer pasta de guayaba



Mientras preparaba la mezcla para un budín de guayaba, vinieron a mi mente recuerdos de mi niñez que todavía conservo en el corazón. Desde que tengo uso de razón, en la nevera de la casa de mi tío materno siempre hay pasta de guayaba y queso blanco. Ese es el postre predilecto de mi tío. Creo que con él fue que aprendí a comer pasta de guayaba y, aunque no siempre la tengo en casa, de vez en cuando me doy el gusto de que ese sea mi postre.

Quienes me conocen, saben lo especial que es mi tío para mí. Aunque nadie toma el lugar de mis padres, mi tío es uno de los seres más especiales en mi vida. Él tiene una manera particular de hacer que me sienta querida y especial. A su casa no puedo ir con el pelo arreglado pues él tiene una habilidad innata de saludarme pasándome las manos por el pelo hasta que me despeina. Lo que quizás él no sabe es que mientras más despeinada me deja, más querida me siento. 

Tío es de las personas que a todo el mundo hace sentir como parte de la familia. A todo el mundo le llama negrito y negrita. Y a todo el mundo le ofrece un platito de pasta de guayaba con queso blanco. Mientras escribo este artículo, tomo una nota mental de que es una tradición que no puedo perder: tendré siempre en mi casa pasta de guayaba y queso blanco para mis invitados; o por lo menos, un budín de guayaba.

Lección:

Nuevamente, confirmo la importancia de los detalles y de hacer a las personas sentirse especiales. Y es algo que tengo muy presente como editora y como profesora.

Los puertorriqueños y la guayaba:

Por otro lado, pero en un tema relacionado, le comentaba a alguien recientemente que he observado la obsesión que tenemos los puertorriqueños con la guayaba. Comemos pasta de guayaba con queso, pastelillos de guayaba, masa real con guayaba y casquitos de guayaba. En fin, cualquier cosa que tenga guayaba se consume rápidamente en el hogar puertorriqueño.

Hasta la música hace alusión a nuestro gran gusto por la guayaba. Es una conversación que he tenido en varias ocasiones, algo así como una investigación informal. Y he aprendido que todo el mundo tiene una receta favorita que tiene guayaba y un cuento relacionado a la fruta o sus derivados.

Me encantaría conocer tu sentir al respecto. ¿Tienes una receta favorita que tenga guayaba o recuerdas alguna canción que mencione la guayaba? Escribe un comentario en este blog o envíame un correo electrónico: vigimaris@editorialnarra.com